Anfield vivió esta tarde una fiesta histórica. Todo estaba preparado para que el Liverpool conquistara la Premier League y no falló. Necesitaba un punto para entonar el alirón a cuatro jornadas del final del campeonato y, pese al gol inicial del Tottenham, los jugadores de Arne Slot reaccionaron como campeones con una contundente manita (5-1) y lograron la 20ª liga inglesa del club, que iguala al frente del palmarés de la competición al Manchester United.
El mítico Anfield se vistió de gala para asistir a otro día histórico e inolvidable. Ese día que, por culpa de la pandemia, no pudieron disfrutar los aficionados para celebrar la Premier ganada en 2020. Hacía 35 años, desde el campeonato logrado en 1990, que no tenían la oportunidad de festejar el título con los jugadores y ese día llegó hoy.
Mohamed Salah y Cody Gakpo pudieron marcar ya en los primeros diez minutos, pero la sorpresa saltó cuando Dominic Solanke, 'red' entre 2017 y 2019, avanzó al Tottenham con un remate de cabeza tras córner botado por James Maddison (12').
Los más viejos del lugar empezaron a creer en fantasmas pero un ex delantero del Liverpool no podía aguar la fiesta. Cuatro minutos después Luis Díaz liberó de presión a sus compañeros al rebañar a puerta vacía una asistencia de Dominik Szoboszlai tras pase en profundidad de Salah.
Un gol con suspense ya que el árbitro lo anuló en primera instancia pero el VAR le hizo rectificar al descartar por milímetros un fuera de juego en la jugada.
Poco después a Gakpo sí se le anuló un tanto pero el Liverpool estaba ya lanzado, jugando a ese ritmo endiablado con que ha barrido a sus rivales a lo largo de la temporada y puso la directa en la recta final hacia el título.
Alexis MacAllister encarriló la remontada, tras robo en las inmediaciones del área de Ryan Gravenberch, con un espectacular zurdazo desde fuera del área (24').
Superada la media hora, el Tottenham, al que solo le iba el orgullo al estar más pendiente de salvar la temporada en la Europa League, se convirtió en un invitado más a la fiesta al encajar el 3-1.
Gakpo recogió un rechace y, tras acomodarse el balón con un par de toques ante la pasividad defensiva, lo colocó en la red con un toque cruzado (34').
Faltaba el gol de Salah y éste llegó en la segunda parte. Asistido por Szoboszlai, recortó y definió con un chut raso ajustado al poste. Es el 28º tanto del 'Egyptian King' de Anfield, máximo realizador y figura indiscutible de esta Premier contando también sus 18 asistencias. La afición se rindió a su ídolo, recientemente renovado hasta 2027, y una seguidora le pidió un 'selfie' para inmortalizar el momentazo con la grada, a lo que el crack accedió gustoso.
Salah acarició el doblete pero fue Destiny Udogie, en su intento por evitarlo, quien empujó en su propia portería un pase de la muerte de Trent Alexander-Arnold (69').
El Liverpool ya es campeón, tras cuatro años seguidos de hegemonía del Manchester City de Pep Guardiola. Lo celebró en presencia de nombres legendarios como Kenny Dalglish, Ian Rush, Steve McManaman... A ellos se ha unido Arne Slot, el técnico que, en su primer año en el cargo, se reivindica con este éxito ante los escépticos que dudaron del acierto de su contratación tras la marcha del inolvidable Jürgen Klopp.
Tras el pitido final, éxtasis, fiestón de los jugadores con la afición en el césped y la guinda: el 'You'll never walk alone' coreado por el equipo ante la mítica Kop en un ambiente de mágica y máxima comunión. El trofeo se entregará al Liverpool en su último partido en casa, el 25 de mayo ante el Crystal Palace.
