Han sufrido. Vamos si han sufrido, pero han acabado pasando. El Inter de Milán de Simone Inzaghi es equipo de semifinales de Champions League, donde se enfrentará al Barça.
El técnico 'interista' apareció con una sonrisa de oreja a oreja, consciente de la gesta que habían logrado. “Es una noche preciosa, contra un equipo muy fuerte. Tuvimos que jugar dos partidos estupendos, pero los chicos estuvieron espléndidos. Es una victoria para compartir con todos. Ahora, a seguir adelante: es una temporada larga y difícil, pero nos está dando muchísimas emociones”, indicó el italiano.
Además, puso en valor lo que es ganar a un gigante como el Bayern de Múnich y la inversión y la confianza de los dueños del club: "Contra un equipo así te da aún más satisfacción: más allá del presupuesto y los honorarios, el Bayern es extraordinario, pero respondimos golpe a golpe tanto en Múnich como aquí en San Siro. Llevamos casi cuatro años con estos chicos, a pesar de todas las dificultades: Zhang y Oaktree lo tenían claro. Pero hemos construido un equipo que ha traído trofeos, una satisfacción que recompensa el trabajo".
Por último, sobre la risa con Arnautovic al final: "Estuvimos hablando porque en los últimos días se había llevado un golpe, le pedí disponibilidad y me la dio. No voy a contar lo que me dijo... San Siro fue algo muy emotivo", confesó.
